La rabia nos puede sonar a leyenda colectiva o a una enfermedad llena de mitos de otra época; la realidad es que dos terceras partes del mundo tienen la rabia aún muy presente. Otro dato relevante es que el 80% de las muertes derivadas de la rabia en el mundo se producen en un contexto agrícola; el restante 20% se produce en ambientes urbanos, con los gatos y los perros como principales focos del contagio. África y Asia son los países en donde está más dispersada, con el 95% de casos mortales, el 45% de ellos son niños. Con todo ello, las personas que mueren al año por culpa de la enfermedad rondan las 60.000.
Este contexto nos da a entender que la rabia aún está muy presente a nivel mundial.
¿Qué situación presenta la rabia en nuestro país?
Si nos centramos a nivel estatal, la rabia se encuentra erradicada desde el 1978 aunque desde entonces se han producido brotes y algún caso aislado; en 2013 hubo un brote al cruzar un perro infectado el Estrecho. Y es que hay que tener muy presente que Ceuta y Melilla hacen frontera con Marruecos, país en el que la rabia está aún muy presente. Otro dato relevante es que en 2019 falleció una persona en el País Vasco a consecuencia de la mordedura de un gato. En esta comunidad autónoma, junto con Cataluña y Galicia, no es obligatoria la vacuna de la rabia.
Con motivo de estos peligrosos casos aislados que se van registrando, se ha generado un debate acerca de si debería ser necesario la obligatoriedad de la vacuna para todo el país. De esta manera se homogeneizaría la estrategia en contra de la rabia para todo el país, sin distinciones de Comunidades Autónomas.
¿Qué es la rabia?
La rabia es una encefalomielitis aguda progresiva provocada como consecuencia de un virus. Es una zoonosis vírica (enfermedad que se transmite de animales a humanos) de extensión prácticamente global. Se contagia mediante mordeduras y, en raras ocasiones, por arañazos. El contagio depende de muchos factores como de la cantidad de saliva del animal mordedor o la profundidad de la herida. Generalmente, el periodo de incubación va de las 3 a las 12 semanas y la mortalidad es del 100% prácticamente.
La vacunación como prevención
Vacunar a nuestras mascotas, no solo es obligatorio en muchas comunidades autónomas, sino que es la mejor manera de hacer frente a la enfermedad y así poder erradicarla. Vacunar a nuestros gatos y perros es muy sencillo y no requiere de mucho tiempo: basta con una única vacunación a los 3 meses de vida. Una dosis es efectiva, aunque algunas comunidades autónomas exigen dos dosis el primer año de vida con un intervalo de un mes entre ellas. En el caso de la Comunitat Valenciana, permite ceñirse a las recomendaciones del fabricante que en función de la marca pueden ir desde la revacunación cada año hasta cada tres años.
¿Cómo hacer frente a la enfermedad?
La OMS marca dos maneras según la situación y el contexto:
- La postexposición (PEP), que ocurre después de haber sido infectado. Además del lavado minucioso de la herida, se ha de administrar las vacunas antirrábicas pertinentes.
- La preexposición (PrEP), en que se administra la vacuna antes de una exposición. Es preventiva, nos aleja de sustos y es la más efectiva para hacer frente a la enfermedad.
Desde Vetland nos tomamos muy en serio las recomendaciones tanto de la OMS como de las administraciones locales y estatales. Por ello, como medida preventiva y para hacer efectiva la prevención, recomendamos la vacunación de los animales incluso en aquellas comunidades autónomas en donde no es obligatorio. Una medida efectiva y sencilla que nos mantendrá tranquilos y alejados de la enfermedad. La vacuna es 100% efectiva y es la mejor manera de controlar la infección a nivel mundial: la vacunación de perros y gatos es lo que ha conseguido librar a los países de la rabia.